Contrario a lo que algunos piensan, la astrología y los horóscopos no es un mero juego de predicción. Es una disciplina en la que se invierten horas de estudio. La colocación de los planetas y su campo de energía, influye, constantemente, en nuestro entorno y en nuestro subconsciente. Todo lo que hacemos pone en movimiento una causa, que acarrea una consecuencia; positiva o negativa, en función de lo que hayamos iniciado.
Nos demos cuenta o no, las energías gravitatorias de los planetas, el Sol y las constelaciones, nos influyen. La Astrología nos sirve para entender nuestro crecimiento personal y transformación espiritual. Nos puede mostrar los momentos de crisis y sus causas.
El universo es circular, así que recibimos aquello que hemos enviado, no como castigo, sino como una llamada de atención para despertar nuestra conciencia, ya sean palabras, pensamientos o acciones. La “Ley del Karma” funciona en todos los planos y viene a decir que todo lo que emitimos, regresa. Como siempre recomendamos también el horóscopo diario nuestro gran aliado del día a día.
El estudio kármico
La astrología kármica está científicamente vinculada a la “Ley de causa y efecto”, la natural de acción y reacción. Cuanto más conscientes seamos de estas leyes universales, más podemos controlar nuestras acciones. Si por ejemplo, mostramos una actitud positiva al exterior, obtendremos una devolución positiva de los demás. Nuestra vida será más placentera.
Es una valiosa herramienta para encontrar las claves de la vida que, en ocasiones, somos incapaces de ver. Descubrir cómo ha evolucionado el alma, desde nuestras vidas anteriores hasta el presente. ¿Cómo podemos hacerlo?
Lee tu pasado para mejorar tu futuro: Arrastramos el equipaje de vidas anteriores que deja su huella en el presente. La astrología kármica estudia signos, horóscopo, aspectos personales planetarios o retrogradaciones, para conocer nuestras potencialidades y brindarnos nuevas claves para la vida presente.
Un estudio kármico: Se divide en tres partes: comprobación del pasado, análisis del presente y proyecciones para el futuro. Este análisis solo tiene sentido si la persona que se somete al mismo cree en la reencarnación.
Paz espiritual: La astrología kármica revisa nuestra historia kármica y nos ayuda a resolver los asuntos pendientes. Con ello conseguimos mejorar nuestra calidad de vida.