Existe una amplia variedad de métodos para tratar de adelantarnos a nuestro futuro, en la forma de predicciones o de previsiones ante situaciones que puedan llegar a suceder. En su mayoría, todos se basan en la creencia de que lo espiritual rige nuestro destino, el cual, si bien no está escrito de forma rígida, se encuentra influido por el movimiento de los transitos planetarios y las energías universales. Si lo vemos bien, tanto el tarot como el horóscopo buscan predecir el futuro para alertarnos sobre lo que puede ocurrir.
Mientras que el tarot es un método de adivinación que se basa en el movimiento energético en el plano espiritual, el zodiaco permite el cálculo astrológico del movimiento de los planetas y su influencia en nuestra vida. Como puedes verlo en muchas páginas web y programas de televisión, muchos guías espirituales utilizan en conjunto ambas prácticas esotéricas para poder darnos un panorama general de lo que acontecerá. Esto nos ayuda a entender cómo se irán dando los acontecimientos en nuestros días, para proyectarnos a futuro desde una base esotérica.
Mayor aproximación
Por lo general, los guías espirituales se especializan en un método o práctica, pero también se esfuerzan por ir conociendo otras que son potenciales alternativas. Con cada creencia o proceso espiritual nuevo viene una mayor capacidad de establecer conclusiones más completas. Esto es precisamente lo que ha pasado con el tarot y los signos zodiacales, los que han evolucionado hacia prácticas más completas y complejas a medida que pasa el tiempo. Son muchos videntes que han incorporado la astrología en la lectura del tarot y esto tiene dos razones fundamentales.
La primera es que leyendo el tarot por signos, los clarividentes encontraron una forma adecuada de darle sus predicciones a un público más nutrido. Son muchos los programas de televisión en los que podemos ver a tarotistas que dan sus predicciones por signo y eso permite que grupos masivos puedan recibir el mensaje cósmico. La segunda razón es que la astrología le otorga una aproximación numérica a las revelaciones que muestran las cartas. La realidad es que la astrología se basa en un cálculo matemático sobre el movimiento de los planetas y su creencia fundamental es que ese mover afecta a cada ser vivo que habita en nuestro planeta. El zodiaco permite trazar y verificar cada cambio planetario y cuando se complementa con una tirada del tarot, el resultado simplemente se potencia y adquiere más validez.
Personalidad y predicción
Uniendo los dos oráculos se pueden generar aproximaciones realmente asombrosas. En esta lógica, tarot y horóscopo confluyen para adivinar los posibles escenarios que las energías cósmicas nos deparan. Además, leer las cartas tomando en consideración la personalidad del consultante permite mayor efectividad. Después de todo, no es lo mismo decirle algo a un desconocido, a decírselo a alguien que sabes como es. El mensaje tendrá mayor sentido y las recomendaciones serán adaptadas a la personalidad de la persona a la cual va dirigida la adivinación. ¡La unión esotérica por excelencia!